Entonces Marge le pide que la mire a los ojos para averiguar si la sigue amando o no, Homero comienza por los pies y va subiendo poco a poco, en el camino se detiene para beber su cerveza mientras dice:
"Fresca y leal cerveza, mi amor por ti nunca morirá"
Finalmente mirá a Marge a los ojos y se da cuenta que la ama más que nunca.
Aunque Homero siempre demuestra amar a la cerveza, es posible que solo el amor de Marge pueda compararse o superar su alcoholica adicción.
Y la frase está de lujo.